martes, 20 de mayo de 2008

Fotografía

Nunca antes
hubo algo parecido.

Un segundo larguísimo
un verano,
unos días.

Olvidar todo,
y pensar,

pensar en nada
para no pensar,
para procurar no sentir.

No quiero dirigirme a nadie,
mi quietud de hoy
es el silencio de hoy,
es todo

aunque queme el aire,
aunque queme el sueño
aunque esté ardiendo vivo
aunque esté muriendo entero.

Escribo para nadie,
escribo para ti,
y ya no sé quién realmente eres,
sólo sé que también eres silencio,
que eres viento girando,
que eres una línea,
un trazo azul,
un corte imperceptible
y profundo.

De verdad que duele
que te
hayas ido.

No hay comentarios: